Un importante desafío que enfrentan las personas migrantes y refugiadas en la región es el acceso al transporte humanitario. El transporte seguro y adecuado es esencial para acceder a la protección (incluida la documentación y la regularización) y a los servicios esenciales, como la educación, la atención sanitaria, la empleabilidad y las oportunidades de integración. Sin embargo, muchas personas refugiadas y migrantes se encuentran con múltiples barreras y riesgos que limitan su movilidad y las exponen a diversas formas de violencia y explotación.

La ausencia de documentación válida y de un estatus regular afecta el acceso al transporte en la mayoría de los países de la región. 

Estas preocupaciones se ven agravadas por los costos a menudo inasequibles del transporte urbano. El transporte urbano regular, que ha aumentado progresivamente en la región, se ha vuelto inalcanzable para muchos hogares de migrantes y refugiados. En el caso de los refugiados y migrantes que viven lejos de sus lugares de trabajo y de las escuelas de sus hijos, esto a veces contribuye a la decisión de los padres de no matricular a sus hijos o de retirarlos de la escuela porque no pueden permitirse los gastos de transporte. 

Los recursos y la información relacionados con las rutas seguras, las condiciones geográficas y climáticas, los peligros potenciales, los horarios y los servicios humanitarios y de protección disponibles se identificaron como una de las mayores necesidades en varios países de la región

Las dificultades para acceder al transporte dentro de las ciudades y entre ellas también pueden exponer a los migrantes y refugiados a riesgos de protección, lo que afecta su sensación de seguridad y afecta su salud en general, lo que a menudo resulta en que caminen grandes distancias a pie o en modos de transporte informales, como el autostop y el uso de transporte de carga, como camiones de carga.

Esta situación expone particularmente a los refugiados y migrantes a riesgos de trata y tráfico de personas. La necesidad de un transporte humanitario digno, ordenado y seguro se considera un requisito crucial para la integración de refugiados y migrantes.

Las principales prioridades del Sector de Transporte Humanitario son:

La provisión de transporte humanitario de corta distancia para facilitar el acceso a bienes y servicios esenciales, como el acceso a la escuela para los niños refugiados y migrantes, los servicios sanitarios, los procedimientos de regularización migratoria y de determinación del estatuto de refugiado, y los medios de subsistencia, especialmente para los que viven en zonas periurbanas, apoyando los esfuerzos de integración de la respuesta global. 

Garantizar el transporte humanitario de larga distancia dentro de las fronteras de un país para los casos de reunificación familiar, la gestión oportuna y sensible de los casos y el acceso a oportunidades de integración y medios de subsistencia, así como apoyar a las personas en situación de vulnerabilidad para que accedan a necesidades básicas como la sanidad, la educación y la protección dentro de los países. 

La respuesta se centrará más en la promoción, el intercambio de capacidades y la prestación de apoyo técnico a las autoridades locales en materia de transporte humanitario.

Además, el Sector desarrollará estrategias de difusión de información sobre las condiciones climáticas, los peligros potenciales y los servicios humanitarios y de protección disponibles.

El objetivo principal de estas prioridades es apoyar la protección, la reunificación familiar, la integración, las oportunidades laborales y el acceso a los servicios esenciales.